Tarifas de fletes son un factor clave en la conformación de beneficios brutos de los transitarios
La crisis de la cadena de suministro ha provocado un aumento de las tarifas de los fletes, lo que ha repercutido en los beneficios de los freight forwarders (transitarios).
Al respecto, un reporte de McKinsey & Company sostiene que entender la relación entre las tarifas de fletes y los beneficios de los transitarios puede ayudar a estos últimos a navegar por el inestable mercado del transporte.
El análisis se basa en datos recientes e históricos que revelan las principales tendencias en torno a los márgenes brutos de los transitarios y el beneficio bruto absoluto en medio de los cambios en las tarifas de los transportistas aéreos y marítimos.
En detalle, McKinsey examinó las estructuras de costos de los transitarios, la relación entre los márgenes de beneficios brutos y los cambios en las tarifas de transporte, las implicaciones para los beneficios actuales de los transitarios y las perspectivas potenciales para los beneficios futuros.
Según el análisis de McKinsey, las tarifas de los transportistas aéreos y marítimos son un factor clave del beneficio bruto de los freight forwarders. Entre el 62% y el 85% de los ingresos de los transitarios se destinan a la compra de reservas de capacidad. Del resto, suelen convertir entre el 20% y el 30% en beneficios antes de intereses e impuestos (EBIT), logrando márgenes de EBIT de entre el 1% y el 11%, con un desempeño del capital invertido (ROIC) que suele superar el 20%, dado el modelo de negocio con pocos activos. Por lo que las estructuras de costos de los transitarios suelen ser flexibles.
Tanto los forwarders marítimos como en aéreos, reducen sus márgenes de beneficio bruto a medida que aumentan las tarifas de transporte, y se inflan en épocas de tarifas bajas. Desde 2005, los márgenes de beneficio bruto subieron cuatro puntos porcentuales en un periodo de diez años, mientras que las tarifas de los transportistas aéreos y marítimos disminuyeron.
No obstante, la dinámica se ha invertido recientemente, y los márgenes de beneficio bruto de los freight forwarders se encuentran en su punto más bajo de los últimos diez años, mientras que las tarifas de los transportistas aéreos y marítimos están en su punto más alto. Pero, por otro lado, el beneficio bruto absoluto del sector (y el beneficio bruto por unidad de carga transportada) puede aumentar en épocas de tarifas más altas.
Los márgenes de beneficio bruto están cayendo tanto para los transitarios aéreos como para los marítimos, a medida que el desempeño de los transportistas se ha disparado, quintuplicándose desde 2017 para las líneas navieras. Mientras tanto, el beneficio bruto por unidad ha aumentado con el incremento de la demanda. Junto con unos costos operativos prácticamente planos, esto ha llevado a unos márgenes EBIT significativamente más altos en comparación con las medias históricas.
Como resultado, los beneficios de los transitarios son actualmente elevados. Sin embargo, se espera que las tarifas de los transportistas aéreos y marítimos disminuyan en los próximos años, por lo que los beneficios de los transitarios tenderán probablemente a la baja.
FUENTE: MundoMarítimo