Líneas navieras aún disponen de mucho margen para incidir en las tarifas
Qué las tarifas spot están cayendo en picada es una realidad. Xeneta da un vistazo a la evolución que éstas han tenido en la ruta que conecta al puerto de Shanghái con el de Los Ángeles, como para tener una idea de lo que ocurre:
24 de septiembre de 2022: US$3.764/FEU
24 de marzo de 2022: US$8.787/FEU
24 de septiembre de 2021: US$7.964/FEU
24 de septiembre de 2020: US$3.874/FEU (en plena pandemia)
24 de septiembre de 2019: US$1.344/FEU (antes de la pandemia)
La baja es evidente, pero las cifras deben ser observadas con calma. Los volúmenes de contenedores transportados siguen siendo saludables, y se debe destacar que todavía no se han anunciado blank sailings (cancelaciones de itinerarios) a gran escala fuera de la red de servicios destinados a Norteamérica. Además, de acuerdo con la consultora, vale la pena recordar que las líneas navieras transportan muchos más TEUs que nunca. De hecho, la mayoría tienen grandes cantidades de TEUs asegurados en contratos a largo plazo a precios mucho más altos que los actuales.
Por otra parte, las líneas navieras todavía tienen capacidad para enfrentar los bajos volúmenes como lo hicieron despiadadamente en el segundo trimestre de 2020, cuando cancelaron y retrasaron suficientes itinerarios y buques que les permitieron equilibrar la demanda frente a la capacidad de transporte y luego mantuvieron la relación demanda-oferta a su favor. ¿Los resultados?: “no sólo detuvieron el colapso de las tarifas de transporte de contenedores, sino que fueron capaces de dirigir la gestión de la capacidad hasta el grado que condujo a esos múltiples trimestres de beneficios récord”.
Podrán las líneas navieras repetir una acción similar ahora, considerando el desplome de las tarifas spot. Por supuesto. De acuerdo con “fuentes” mencionadas por Platts, los operadores están considerando las presentes vacaciones de la Semana Dorada de China (del 1 al 7 de octubre) como un posible piso para las tarifas de transportes de contenedores. Según precisan, los participantes del mercado están "preparándose para un programa de blank sailings que será anunciado", aseguró Platts.
Factor amortiguador a favor de las navieras
Ahora se da un factor clave que diferencia la situación actual a la de 2020 y es que un descenso de las tarifas spot no tiene el mismo efecto en las finanzas de las líneas navieras que antes de la pandemia, debido al aumento del uso de contratos a largo plazo que buscan hacer más resilientes a las cadenas de suministro mundiales, luego del desastre ocasionado por la pandemia.
Actualmente, Las líneas navieras tienen mucho más volumen en contratos a largo plazo y con tarifas más altas en lugar de múltiples contratos spot. Zim, por ejemplo, aseguró recientemente que las tarifas de sus contratos de 2022 eran dos veces más altas que las de 2021, mientras que Maersk reveló que tiene el 71% de sus TEUs contratados por más de un año ahora, en comparación con el 46% en 2019. Es decir, el mercado ha cambiado.
Si bien se espera que algunos contratos se renegocien a medida que las tarifas spot bajen, los contratos restantes de alto precio equilibrarán con creces las transacciones spot de menor valor. Por lo tanto, las tarifas spot no sólo tienen un largo camino de caída antes de volver al punto de partida -incluso al ritmo de descenso más pronunciado de lo esperado-, sino que también están eclipsadas por las tarifas de contrato cuando se trata de los beneficios obtenidos por las navieras, expone Xeneta.
¿Y si las tarifas siguen bajando?
Sin embargo, no cabe duda de que la dinámica de las líneas de asegurar grandes volúmenes mediante tarifas a largo plazo se hará difícil si el mercado a spot sigue bajando. Las dificultades en este punto no se pueden definir con certeza, pero lo más probable es que la mesa de negociaciones adquirirá más importancia.
Por otro lado, para que las tarifas spot logren estabilizarse es necesario que se resuelvan múltiples cuestiones económicas mundiales. Se desconoce el efecto del incremento de las tasas de interés de la Reserva Federal de EE.UU. en la economía estadounidense.
El dólar se encuentra en niveles récord frente a la mayoría de las divisas, lo que podría servir para que los envíos mundiales a EE.UU. sigan siendo fuertes, ayudando así a que las tarifas de transporte de contenedores también lo sean.
Otro factor es si China continuará aplicando su política Cero-Covid que merman la actividad de sus principales hubs de exportación.
Pero sin duda el factor más determinante son los 7 millones de TEUs de nueva capacidad que empezarán a ingresar al océano el próximo año. Sólo en ese momento se podrá observar si la gestión de la capacidad podrá evitar un descenso más permanente de las tarifas.
FUENTE: Mundo Marítimo